Karate Tradicional. (Parte-4 y última)

GRADOS & CINTURONES NEGROS

El simbólico Cinturón Negro,
consecuencia a la dedicación

El grado de Cinturón Negro y “Dan” en Karate, es un tema goloso por lo simbólico y por el dinero que mueve, pero hay que decir que su validez en realidad eminentemente moral, y depende en gran medida en el Karate Tradicional de las personas que lo otorgan y/o respaldan, sea en la organización que sea, pues los aspectos a tener en cuenta pueden ser sensiblemente diferentes. Por ello los altos grados “Dan” deportivos o de organizaciones deportivas no tienen hoy ya especial importancia en sí mismos (a pesar de la posible valía personal de muchas de las personas que los tienen) porque esa organización puede no ser moralmente competente en esa materia (ya que los grados “dan” son parte del aspecto tradicional del Karate y no del deportivo-competitivo, donde lo son las medallas y copas). Son tiempos ya en los que las diferencias son muy patentes y las organizaciones deportivas no representan lo que es la realidad del Karate y de hecho existe una gran cantidad de karatekas y maestros fuera de ese ámbito deportivo y que se estima como mínimo en otro tanto.

A menudo las instituciones deportivas del Karate atacan al resto en base a un intrusismo irreal y en el que muy a menudo, incluso muy al contrario, es el mundo deportivo quien es intruso en el auténtico Karate Do, el Camino del Karate Tradicional). Intrusismo no es el No pertenecer a la federación deportiva correspondiente, pues las características de las artes marciales tradicionales hacen que muchos consideren estar fuera de ella (mientras pertenezcan a organizaciones legalmente constituidas, lideradas por reconocidos maestros de prestigio y respaldadas en su caso por internacionales o con matriz en Japón, con esas mismas características.

Los exámenes de grado son un tema sobre el que reflexionar y también  sobre la forma de aceptar sus resultados, máxime cuando son negativos. El maestro Yamazaki contaba que pasó muchos años sin saber el motivo de sus suspensos para 1er Dan. Nunca preguntó ni se le explicaron. Esa es la actitud. Treinta años más tarde los supo, y por cierto, habían sido el exceso de confianza.  El maestro Hironori Ohtsuka siempre ha hablado del exceso de confianza como uno de los males del Budo, junto al menosprecio, cólera, temor, etc…  Dicho sea de paso, eran tiempos en que los exámenes no contaban con fecha previa, por lo que no se podían preparar específicamente durante los meses anteriores. Solo se conocía la fecha un par de días antes. Eso obligaba a estar siempre preparado, lo cual es más real. Ello forma parte también del Karate Tradicional. Ah, y por supuesto tribunales de examen siempre de karate-gi; nunca de chaqueta y corbata.

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Salvador Herraiz Embid

Author: Salvador Herraiz Embid

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2 Comments

  1. Avatar

    Recuerdo los exámenes con el maestro Yosuke Yamashita. Si no estabas al nivel no te aprobaba, por mucho que hubieras ido a entrenar y te conociera.
    Me suspendió el examen de 4 dan tan solo por no poder levantar los SAIs en una técnica, porque me dio una contractura en la espalda.
    Pero me vino bien para entender el Kárate desde otra perspectiva, y al año siguiente me presente y aprobé sin problemas.

    Un Saludo desde Murcia, del grupo de José Maria Caballero. Osu

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  2. Avatar

    El problema de los grados, ya sean del contexto tradicional o deportivo, e independientemente del arte marcial que se trate; es bien simple: Hasta tanto no exista un perfil preestablecido que describa el desempeño integral esperado por el aspirante, no dejarán de ser una confusa y manipulable ilusión.

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