Sobre la enseñanza por copia y mando directo
Cuando daba clases de Metodología del Karate en la Escuela Nacional de Preparadores, enseñaba que la forma más común de enseñanza del Karate, y la que ha sobrevivido hasta nuestros días, era la Enseñanza por Mando directo. Pero, dejarme aclararlo, esa no ha sido siempre la forma de enseñar el Karate,o su antepasado más directo y conocido el Quanfa de China.No ha sido, a pesar de que así se la conozca, la Forma Tradicional de Enseñanza, sino el fruto de unas circunstancias históricas muy concretas. La enseñanza del Quanfa, en su forma antigua, representaba que el discípulo tenía que demostrar su inequívoca voluntad de entrar en la casa de su Sifu y seguir todas y cada una de sus instrucciones, sin cuestionarse nada, solo copiando e imitando lo que el Sifu le enseñaba, o habitualmente lo que le enseñaban aquellos alumnos del Sifu a los cuales era confiado.Y, desde ese punto de vista era una enseñanza mentorizada e individualizada. Habitualmente el Sifu se encontraba en una tarima, o un lugar más elevado, y observaba como sus alumnos entrenaban y evolucionaban. El Maestro participaba poco de la clase, excepto alguna corrección de vez en cuando y, casi siempre, a sus alumnos más aventajados.Así es que la enseñanza era fundamentalmente de carácter individual. En Okinawa era también mas o menos así en la antigüedad. Entre otras cosas porque, fuera de los militares chinos de Kumemura, el entrenamiento era más bien discreto, por no decir secreto, y oculto al público, por lo que, a menudo, se entrenaba de noche. Usualmente el Maestro solía tener pocos alumnos y los hacía entrenar por parejas, como las fotos de los practicantes de Goju Ryu que ilustran este texto. Pero llegó el Maestro Itosu, y el y sus alumnos comenzaron a enseñar en las Escuelas de Okinawa, y ahí, al haber muchos alumnos la vez, se cambió el método de Enseñanza individualizada hacia el Mando Directo, como podemos ver en las fotos de los entrenamientos de las Escuelas Secundarias de Okinawa ante el Castillo de Shuri. Y esa cantidad simultánea de practicantes exigía una enorme disciplina, casi militar, que fue la que se adoptó y ha llegado a nuestros días. ¿Pero, que método didáctico era el utilizado? Pues, como en la enseñanza de la pintura japonesa, el Método empleado era el del Funponshugi, 粉本主義, o Método de la Copia. Por eso vemos al instructor subido sobre una tarima mostrando la forma correcta de ejecutar la técnica, es decir, actuando como modelo, y eso es lo que es un Funpon 粉本, un modelo. El Funpon粉本 debía ser visto por todos los alumnos, que le imitaban y copiaban...
SHIN GI TAI: o el Arte de vivir el Arte
Yo soy un convencido confeso de que en las artes marciales y en especial el karate, no hay misterios. Por lo cual me considera un pragmático practicante. No obstante con el paso de los años me voy dando cuenta dentro de mi propia perspectiva que si hay una vivencia mística que es imposible de trasladar a nadie y que responde a un estado que es la sumatoria de práctica, tiempo y edad. No existe ni un antes ni un después, solo el ahora y el acá. Tal apreciación no es un acto de iluminación fortuito que se alcanza cuando se han completado tantas horas, o se sepan tantas técnicas…para nada. Es una experiencia a la cual quizás algunos lleguen si no han cortado el camino.. Sin dar una respuesta que por supuesto y de acuerdo a lo expresado desconozco cómo se produce, es posible que algo se puede divisar por intermedio de lo que continua. Hay factores que son comunes en todas las artes marciales, y una de ellas son los tres principios fundamentales, el Shin Gi Tai. Traducido literalmente como Shin = espíritu, Gi = técnica y Tai = cuerpo, se trata de realizar un recorrido a través del entrenamiento (Do = camino), para llegar a fortalecer y mantener puro el propio espíritu, aprender e interiorizar la técnica y entrenar y preparar el cuerpo, todo en conjunto. El nivel más alto que puede obtener un artista marcial es el conseguir armonizar estos tres principios como uno solo, lo que un Sensei denominaría como Shin Gi Tai Ichi. Y ese mismo Sensei tal vez te diria esto: Puede ser también que de igual el tiempo que lleves de entrenamiento, hay artistas que puede que necesiten de toda su vida y aun así no llegan… Otros en cambio pueden ser capaces de encontrarlo en cualquier momento. La diferencia estriba en no buscar, siempre ha estado ahí, tu cuerpo lleva contigo toda tu vida, pero quizás no supiste escuchar cual era el entrenamiento más adecuado que le convenía… las técnicas existían desde hace mucho tiempo, pero tal vez no era el momento que llegarán a ti… tu espíritu rige tu camino, pero a veces no le entendemos… Cualquier artista marcial medianamente instruido sabe de la importancia que hay de que los tres principios funcionen como uno solo para poder sobrevivir, para poder salir victorioso en el campo de batalla y lo más importante, para nosotros mismos para poder vivir plenamente el dia a dia. De nada servirá entrenarlos por separado, tan solo conseguirás un cuerpo fuerte por las horas de entrenamiento físico, una gran concentración por el estudio de la meditación...
Develando el «Secreto» del Karate «Sin fuerza».
INTRODUCCIÓN En las artes marciales existen (muchos) secretos míticos que perjudican (mucho) su comprensión, lo cual afecta (mucho) el aprendizaje de los alumnos. Aprendizaje que, consecuentemente, cual reacción en cadena, se multiplicará en las nuevas generaciones, hasta instaurarse como paradigma a seguir. Ejemplos hay muchos, varios de los cuales hemos tratado en diversas publicaciones, donde, gracias a la ciencia (sin contradecir la esencia de la tradición, más sí su interpretación y uso), se ha podido ofrecer una idea más completa y profunda, así como algunas recomendaciones para su utilización. DESARROLLO En esta oportunidad nos centraremos en un tema (mito) muy tratado en las artes marciales en general, y el karate en especial, conocido como hacerlo “si fuerza”. La esencia de esa expresión (completamente válida) se base en que el movimiento se comprenda y domine a tal punto que pueda hacerse sin esfuerzo, pero logrando el máximo de eficacia (cumpliendo con la célebre frase milenaria oriental de Seryoku zenyo). Hasta ese punto estamos de acuerdo, la discordancia aparece cuando, en la mayoría de los casos (desgraciadamente), al alumno se le plantea que este nivel de dominio, solo se logra luego de mucho tiempo de práctica (fundamentalmente en solitario para lograr el adecuado nivel de interiorización de la ejecución). No es de extrañar que, una explicación tan incompleta y abstracta, unida a una proyección temporal tan larga e incierta, induzcan más a la confusión que al entendimiento, lo que muchas veces deriva en la desmotivación y abandono del practicante (cuya responsabilidad en ese caso no es suya, sino que recae en el maestro). ¿Por qué?, la respuesta es simple: ¡¡¡si tenemos la responsabilidad de enseñar, estamos obligados a prepararnos lo mejor posible para ello!!! Con la intención de solucionar ese negativo percance, y utilizando la ciencia para develar el “secreto” que mitifica (y complejiza y eterniza) la comprensión del “karate sin fuerza”; partiremos de las ciencias que describen el funcionamiento orgánico, debido a que el cuerpo es la unidad estructural encargada de realizar la acción. La idea inicial a aclarar es que, cuando se habla de realizar un movimiento “sin fuerza”, en este caso se entiende a hacerlo sin esfuerzo, que sea natural, que salga fluido, etc. Para ello, como punto de partida, hay que saber primero, de manera aislada, cómo debe aportar el organismo con cada una de las dimensiones de su funcionamiento para lograrlo; y segundo, cómo deben integrarse todos esos aportes. De ese modo, los componentes de la “ecuación” que completa la “sumatoria” de las acciones que derivan en el “karate sin fuerza”, son las siguientes: Sistema Nervioso Central (neurociencias): El ser este el sistema (y órgano) encargado...
KARATE-DO: Igualdad
En la práctica del karate, las distintas técnicas que lo componen son las mismas para todos, sean hombres, mujeres, niñas, niños. El practicante que está realizando el movimiento, debe de adaptarlo a él, según sus aptitudes, (ejemplo: si no tiene elasticidad muscular, los golpes de pierna en vez de hacerlos altos a la altura que él o ella pueda, ejecutando el ejercicio bien, según los cánones técnicos, para progresar sin lesionarse). La técnica es la misma para todos. Cuando se está entrenando en el tatami, no hay masculino y femenino. Son karatecas realizando aquellos movimientos que el profesor indique. El respeto y la atención es el mismo para todos. También cuando se hacen correcciones generales; ejemplo: bajen la cadera, o si se corrige individualmente aquel error que esté cometiendo el o la karateca. Esto lo podemos leer en la normativa de grados de la federación cuando habla del tribunal que “no pretende poner metas inalcanzables sino reconocer el esfuerzo físico-técnico y la actitud demostrada por los aspirantes en función de sus características y posibilidades”. Cuando el entrenamiento se realiza por compañeros es lo mismo. Al ser una evolución entre los dos, que están trabajando juntos los movimientos, se corrigen uno a otro aquellos errores que tengan, sin distinción de género. En combate entre un hombre y una mujer, independientemente de la edad que tengan, todas las técnicas que se realicen deben ser ejecutadas con precisión y control, para no hacerse daño uno a otro. Como significa la definición de karate; mano vacía de toda mala intención. Todos los katas básicos y superiores, de mayor o menor dificultad, son los mismos para todos los karatecas sean niños/as, mujeres, hombres, jóvenes, mayores. La etiqueta, la vestimenta es igual para todos (los trajes de árbitro, el karategi) En la normativa de grados, cuando se refiere al aspirante a cinturón negro cualquiera que sea el DAN al que se examina, indica; “debe ser exquisito con su presentación ante el tribunal, indumentaria y aseo, actitud y conocimiento teórico, también con la realización de las ejecuciones técnicas que deben ser lo más correctas posible”. No hace distinción de géneros, las técnicas son iguales para todos. Funakoshi, desarrolló unas normas de comportamiento del practicante de karate-do, recogidas en el Dojokun, entre estas reglas está el respeto a los demás. Como podemos leer en ellas, no hace distinción entre hombre-mujer a la hora de aplicarlas tanto en el entrenamiento, en el tatami, como en la vida ordinaria de cada uno. Quería aplicar los principios Filosóficos del karate-do a la vida diaria para beneficio del individuo y de la sociedad. Este escrito está basado en mi experiencia personal...
La energía en el kata
INTRODUCCIÓN La traducción literal de la palabra «kata» en nuestro idioma es «forma». Ha sido en los katas donde todos los elementos fundamentales del karate han sido desarrollados y codificados durante años por los maestros del Karate-Do. Los katas son realmente la esencia del Karate, puesto que en ellos están los principios básicos, las técnicas y la tradición de este Arte. Todo está incluido en las formas; a saber: posturas, posiciones, movimientos del cuerpo, desplazamientos, respiración, varios tipos de técnicas, timing, kiai, una actitud mental correcta etc. (Katas superiores. José Mª Fraguas) Los katas de Karate son ejercicios reglamentarios de este arte marcial, que consisten en series de movimientos debidamente codificados y encadenados entre sí con los que el practicante describe una trayectoria denominada Embusen, en el transcurso de la cual efectúa desplazamientos, giros, bloqueos, ataques, derribos y esquivas, simulando un combate contra uno o varios presuntos atacantes.. (Estudio técnico comparado de los katas de karate. Hermenegildo Camps/ Santiago Cerezo) Y así podríamos seguir buscando definiciones de la palabra «Kata» y en ninguna aparecería su relación con la energía interna o «Ki». Aunque no entendamos mucho sobre energía, nadie puede negar que su significado es: todo aquello que es capaz de producir un trabajo. Pues bien si nos atemos a las definiciones de «kata» , desplazamientos, ataques, posturas, etc., todo ese trabajo tiene que ser producido por algún tipo de energía. El siguiente estudio habla sobre el kata y la energía que desarrolla, pero no a nivel de la utilización química de los alimentos y su almacenamiento en ATP, sino a nivel más sutil, de cómo afecta la ejecución de un determinado kata en el campo energético humano o aura. El trabajo que expongo a continuación es completamente empírico y queda abierto a estudio e investigación. El resultado dependerá de los katas y el estilo, las personas y su nivel técnico, las emociones y estados de ánimo, así como otros factores que pueden influir en el campo energético humano. He realizado un estudio sobre once personas, todas practicantes de karate, de distintos sexos y edades, de años de práctica y de nivel técnico, que van desde cinturón verde a 2º Dan. Entiendo que el estudio de población no es lo suficientemente amplio para formular una hipótesis consistente, pero no pretendo sentar cátedra sino reflejar mi inquietud sobre un tema que considero importante dentro de la práctica del Karate-Do y que con el paso de los años y la experiencia todo profesional de este bello Arte Marcial debería conocer. Los katas elegidos han sido los cinco Pinan, pues los katas superiores obligarían a que los individuos del estudio fueran...
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