Rol del kata dentro del proceso pedagógico de formación de los karatekas
INTRODUCCION: En muchos casos se asumen los kata como la esencia de karatedo, y, en congruencia con ello; constituyen uno de los elementos de mayor (y muchas veces el de mayor) peso en los exámenes de grado. Pero, ¿qué son (realmente) los kata, para recibir ese tratamiento? De manera general, los kata se reconocen como la representación de combates imaginarios, contra uno o varios adversarios con o sin armas, en los que se integran movimientos de ataque y defensa en un marco prestablecido. Con respecto a su importancia, se les adjudica mayormente un papel de forma de entrenamiento que permite el desarrollo de diversas capacidades bio-psico-sociales en el organismo del practicante. Sobre el tema, Vidal N. (2008), refirió que: “Los movimientos y técnicas que encontramos en cada Kata son modelos cuya eficacia fue puesta a prueba a través de períodos de enfrentamientos. Fueron ensamblados en secuencias para sistematizar y para encontrar una metodología de enseñanza lo más práctica posible. Muchas de las formas usadas hoy fueron introducidas entre 1600 y 1950 de China a Okinawa ya que en Oriente el Kata era el único medio para la instrucción de los aprendices”. En ese caso, aun cuando se reconoce que esa definición es una de las que mejor ilustra la importancia de los kata dentro del proceso de formación de los karatekas, utiliza diversos términos como modelo, método y medio; que generan confusión en relación con su ubicación dentro del referido proceso, y de lo cual depende la manera de utilizarlo en el mismo. Para dilucidar esta polémica se analiza la esencia del kata, tomando como referencia la estructuración didáctica del proceso pedagógico de la enseñanza. DESARROLLO: La primera categoría didáctica que aparece dentro del proceso de enseñanza la constituye la evaluación, en este caso de entrada o diagnóstico, que permite recopilar la información acerca de la situación de los practicantes; y partiendo de la cual se diseña el proceso a aplicarles. Ya comenzado el proceso como tal, la categoría que se presenta es el objetivo, que constituye el punto de referencia hacia el cual se orientan todos los esfuerzos y recursos. Una vez establecidos los objetivos a cumplir, corresponde seleccionar los contenidos que debe recibir los alumnos para poder cumplirlos. Dichos contenidos se reconocen como el volumen de información y experiencias que se hace legar al alumno durante su formación. En ese sentido, por el tratamiento que se le otorga a los kata como principal instrumento de evaluación dentro del proceso de formación de los karatekas, las mismas se asumen como contenidos. No obstante, desde el punto de vista pedagógico, los contenidos se corresponden con los elementos aislados (en...
Comprender el karate de Okinawa
Siempre pensé, y a si se lo dije a mi Sifu, que lo necesario para comprender el Karate de Okinawa, de cualquier Línea, está en el Yongchun Baihe Quan, la Grulla Ancestral, o en cualquiera de las diferentes variantes que tienen los mismos Principios. Muchísimas veces he enseñado que una de las técnicas más peligrosas y efectivas del Karate consiste en el blocage de la mano atacante, agarrarla y presionar con los dedos restregando las caras interna y externa del antebrazo cerca de la muñeca en ambas puertas, que así se activan : La externa o Waiguan TR5 y la interna o Neiguan PC6. Después se termina con un golpe de Shuto a Renyin E9, en la cara interna del esternocleido mastoideo, en línea con el cartílago tiroideo o nuez de Adan. Renyin E9 o seno carotideo de la arteria carótida interna es un punto baroreceptor que regula el flujo sanguíneo al cerebro. Los senos carotídeos se localizan en el nacimiento de cada arteria carótida interna y contienen receptores que detectan un incremento o caída de la presión sanguínea (baroreceptores). En respuesta a estos cambios de presión, se envían impulsos nerviosos al centro cardiovascular en el tronco cerebral, y luego viajan al corazón y a los vasos sanguíneos por medio de los nervios simpático y parasimpático. Un incremento en la presión sanguínea inicia un reflejo de protección que incrementa el tono parasimpático y disminuye el simpático. El tono parasimpático incrementado ralentiza el corazón y reduce el gasto cardiaco. El tono simpático disminuido relaja las pequeñas arterias musculares que regulan la presión sanguínea y la presión disminuye. La compresión del seno se interpreta por los baroreceptores como un incremento de la presión sanguínea, y entonces se dispara el reflejo del seno carotídeo. La compresión del seno ( Con una técnica en yubi basami, por ejemplo) o un fuerte traumatismo directo, o en la zona adyacente al seno carotideo, bien en Shuto, o con el antebrazo, como muestra el Sifu Pan Qiongqi, se interpreta por los baroreceptores como un incremento de la presión sanguínea, y entonces se dispara el reflejo del seno carotídeo. Uno o ambos senos son vulnerables a la compresión por una presa de estrangulación, o por un golpe, aplicados sobre la parte superior del cuello. Hay que tener en cuenta que la zona es muy sensible pues las dos arterias carótidas internas y la arteria basilar (unión de las dos arterias vertebrales) forman un círculo de arterias comunicantes conocido como Círculo de Willis. Una de las consecuencias del traumatismo puede derivar en la disección de la arteria carótida y la formación de trombos que pueden provocar un derrame....
Resiliencia y superación
«Las personas más bellas con las que me he encontrado son aquellas que han conocido la derrota, el sufrimiento, la lucha, la pérdida y han encontrado la forma de salir de las profundidades. Estas personas tienen una apreciación, una sensibilidad y una comprensión de la vida que los llena de compasión, humildad y una profunda inquietud amorosa. La gente bella no surge de la nada». Elisabeth Kübler-Ross, psiquiatra y escritora. En muchos momentos de nuestra vida la capacidad que tenemos de ser resilientes va a ser una cualidad fundamental que marcará la diferencia en nuestra gestión de las emociones a la hora de afrontar situaciones adversas. El texto que encontrareis a continuación pertenece a mi último libro Cuando decir NO es el camino: una mirada vital a la violencia hacia la mujer, y aunque está enfocado a la mujer por la naturaleza de la obra, es igualmente aplicable a ambos géneros. La resiliencia es la capacidad de adaptarse a una situación adversa, recuperarse y salir fortalecido de ella. Esto no quiere decir que las personas resilientes no padezcan dolor o sufrimiento, sino que tienen la capacidad de asumirlo y aprender de él. Todas las personas sentimos dolor, angustia y pasamos por situaciones difíciles a lo largo de nuestra vida, y cómo seamos capaces de afrontarlo condicionará nuestro desarrollo personal y la capacidad para relacionarnos con nuestro entorno. La resiliencia no es una cualidad con la que nacemos pero sí que se irá desarrollando, de manera diferente en cada persona, a lo largo de nuestra vida en función de las circunstancias que vayamos viviendo. Al no ser una cualidad innata podemos aprender a estimularla y a desarrollarla en cualquier momento de nuestra vida. Durante los primeros años de vida, el apego positivo, o contar con un modelo resiliente en el que mirarse, favorece el desarrollo adaptativo y constituye el escenario ideal para el desarrollo de la resiliencia. Por el contrario, una sobreprotección o un escenario de violencia o maltrato favorece la desconfianza, la falta de autoestima y la inadaptación social, y con ello, el desarrollo de la resiliencia desde las etapas más tempranas. Pero todo esto no quiere decir que solo el que ha recibido un apego positivo y ha tenido amor y cariño vaya a desarrollar más resiliencia, sino que la va a favorecer, porque también hay muchos casos de niños que han crecido en un ambiente de desapego y violencia y, sin embargo, han desarrollado un gran sentido de la resiliencia. Cuando hablamos de la violencia hacia la mujer, esta produce en ella unas consecuencias físicas y psicológicas importantes; así, las mujeres que tienen más capacidad de resiliencia...
El Karate del futuro, hoy.
Competición de katas Introducción: El hecho de haber trabajado por varios años en el Karatedo, primero como entrenador de alto rendimiento y luego como formador de maestros, me ha permitido interactuar con personal proveniente de diversos estilos. Ello, a su vez, me ha dado la oportunidad de identificar una serie de carencias y/o deficiencias inherentes al Karatedo de manera general, que trasciende los estilos tanto de índole de contenido como de forma; y que limitan por tanto los beneficios a recibir por sus practicantes, como al adecuado desarrollo y progreso de la actividad. Debido a que el kumite no difiere de manera significativa entre un estilo y otro, las carencias y/o deficiencias identificadas se constatan en los kata. En ese caso, los aspectos que han demostrado que necesitan ser analizados, y perfeccionados, son fundamentalmente algunos patrones de movimientos que, desde el punto de vista psico- -fisiológico y biomecánico, no facilitan su ejecución, y consecuentemente limitan su efectividad ante una posible situación real; así como difieren de lo que acontece en el kumite (que constituye su reflejo). Los otros aspectos a perfeccionar, son las formas de enseñanza y evaluación. Desarrollo: Entre los aspectos específicos a analizar, y perfeccionar, se encuentran fundamentalmente: INICIO DEL KATA: Los kata, luego del respetivo saludo, inician con una postura natural (Heisoku Dachi o Musubi Dachi fundamentalmente), de la cual se transita hacia otras posturas vinculadas con acciones “de combate” propiamente dichas. En ese caso valdría la pena preguntarse, si el kata es un reflejo del kumite, ¿eso es lo que en la práctica sucede? Realmente no. En la práctica el karateka, al percibir un estímulo hostil, ya sea en un torneo o en una situación de defensa personal, tiene un instinto de conservación que se concreta mediante la adopción de una postura de guardia, de la cual se deriva la correspondiente acción más pertinente según sea el caso. De acuerdo a esa lógica, luego del saludo, y antes de comenzar las acciones “de combate” propiamente dichas en los katas, debería adoptarse el Kamae Te. Dicho Kamae Te debería ser preferiblemente en Fudo Dachi, que es la postura más común en el kumite, y además debería ser de libre elección en relación con la lateralidad preferida por el ejecutante (como acontece en la realidad). Sobre el mismo tema, y sin contradecir la esencia defensiva del Karatedo (que puede inculcarse a través de múltiples maneras, sin que ello implique limitar la reacción psico-fisiológica del ejecutante), debido a que las acciones de combate son diversas y dependen de la situación propia que se presenta en cada caso; la primera acción de los kata debería ser igualmente variada....
Todo parecido con la realidad de hoy en día, no es ficción, es la realidad de hoy en día.
Funakoshi vs. Motobu: No importa qué estilo de artes marciales persigas o cómo lo hagas, tu enfoque polarizará a las personas. Algunos practicantes respetarán y admirarán tus esfuerzos, mientras que otros explicarán alegremente por qué nunca deberías usar un gi nuevamente. Las artes marciales afectan a las personas de una manera muy profunda y fundamental. Debido a eso, los puntos de vista divergentes sobre asuntos marciales pueden cambiar drásticamente para empeorar … rápidamente. Uno de los conflictos más famosos entre los principales exponentes de su arte fue entre los dos maestros de karate de Okinawa que ayudaron a iniciar la introducción del karate en la parte continental de Japón desde su remota isla donde se desarrolló: Okinawa. La disputa fue entre Funakoshi Gichin y Motobu Choki. Ambos son hombres de gran fama y reputación, pero en la mayoría de los casos eran opuestos diametralmente. Dos maestros con diferentes métodosFunakoshi Gichin fue el iniciador del primer estilo puramente japones, que hoy se llama Shotokan Karate do. Razón por la cual Se le conoce comúnmente como el padre del Karate japonés, y con razón. Nadie hizo más para llevar el karate a la vanguardia en Japón, y los esfuerzos de Funakoshi para lograr que Karate fuera reconocido por el japonés Butokukai (la organización japonesa establecida por el gobierno para supervisar, preservar y promover las artes marciales en Japón) fueron inmensamente impresionantes. Curiosamente, entre sus compañeros y maestros, Funakoshi nunca fue considerado un luchador o técnico dominante. Él ganó su reputación como un caballero de pensamiento elegante; un hombre de filosofía, habilidad lingüística, perspicacia política y, por supuesto, cierto talento en karate. En cuanto a las formas y la técnica … Funakoshi también demostró su sabiduría al asociarse en gran medida con uno de los grandes eruditos de la historia moderna: Mabuni Kenwa. La memorización de diversos katas por parte de Mabuni fue asombrosa, y muchos instructores de primer nivel vertieron su conocimiento sobre él como un cuenco, con la esperanza de que él pudiera ayudar a transmitir sus artes, que en algunos casos casi estaban moribundas. Mabuni, como Funakoshi, era un hombre refinado en términos de educación formal y en el conocimiento del idioma japonés y las costumbres sociales japonesas. Quizás por eso se llevaban tan bien. Pero al otro lado del pasillo había un hombre a quien consideraban brusco y distante, pero también un hombre que era un extraordinario luchador con un poder tremendo. Este hombre era Motobu Choki, a menudo conocido como Motobu Saru (el Mono), llamado así por su gran agilidad, y quien a la postre demostraría ser el yang del yin siempre presente de Funakoshi. El desarrollo...
¿Habéis oído comentar sobre el Gyaku zuki plongée ?
Pues aquí tenéis una imagen que seguro que todos los competidores han experimentado en alguna ocasión, cuando el cuerpo se lanza en plancha contra el adversario y el tsuki llega sólo, como por sorpresa. Los que alguna vez hayan tenido ocasión de tirar con un rifle con miras de precisión y gatillo «al pelo» sabrán de lo que hablo : No hay movimiento de contracción del cuerpo en el momento del disparo, hay relajación, y el disparo nos sorprende, y hay un blanco preciso. En este tipo de tsuki pasa igual, es un tsuki rápido y potente, y sin embargo las caderas no intervienen prácticamente, quien nos presta la fuerza es la acción de la gravedad. Y con esta técnica obtenemos un resultado satisfactorio, utilizando en perfecta armonía varias técnicas y Conceptos (que no se suelen explicar ni siquiera a los grados más altos). Comencemos por nombrar a la técnica que nos permite dominar el Maai o distancia para acortarla rapidamente, y que es conocida como Shukuchi Ho.Seguidamente nombremos a la técnica que nos permite avanzar en esas condiciones y tomando prestada la fuerza de la gravedad al desplazar el Centro de Gravedad a voluntad. Esa forma de caminar se aprende en el Kata Naifanchin y se denomina Hiza u nuku, o rodilla flotante. Al respecto, decir que es característica del Shurite, y esencial para realizar su forma de Tsuki, y que el Maestro Anko Itosu decía que caminar en Karate se aprende en Naifanchin. Y, por último, ese avanzar con misma mano y mismo pie, desequilibrado hacia adelante, o manteniendo un equilibrio dinámico, es lo que se conoce como Nanba aruki, que era la forma que permitía a los mensajeros tradicionales de Japón recorrer grandes distancias con un esfuerzo mínimo, porque la energía necesaria para ello se tomaba de la tierra y de la fuerza de la gravedad. Cuando yo comencé a competir en Karate era de lo más habitual que la técnica de ataque fuera un Oi zuki, esencialmente porque la distancia de combate era Toi maai, y la única forma posible de llegar al adversario sin ser detectado hasta el último segundo era dominar Shukuchi Ho. La distancia de combate cambió a Uchi maai y la técnica de aproximación a Tokoshi, así es que la técnica de ataque cambió a Gyaku zuki. Es difícil hoy en día ver un Oi zuki en Competición, o un tsuriashi mae geri, o Mãe Mae geri, como aprendimos nosotros en Tenerife de José Pérez García, y en Madrid de su Maestro Yasunari Ishimi. Sencillamente porque la distancia de combate ha cambiado, se ha acercado, y las técnicas se han adaptado....
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